La Guardia Costera de EEUU continuaba este miércoles la búsqueda de 39 desaparecidos tras el naufragio del bote en el que viajaban frente a la costa de Florida, en un hecho «sospechoso de tráfico de personas».
Reveló que un «buen samaritano» alertó a las autoridades el martes del naufragio a las 8:00 am, tras rescatar a un hombre aferrado a una embarcación volcada, unos 70 kilómetros al este de la ensenada de Fort Pierce.
El náufrago relató que en la noche del sábado había salido de las islas Bimini, en las Bahamas, con otras 39 personas. Un temporal había volcado la embarcación en la mañana del domingo. Las autoridades sospechan que se trata de un caso de «tráfico humano».
Ninguna de las personas a bordo llevaba salvavidas, según el sobreviviente, quien fue atendido por deshidratación y exposición excesiva al sol.
«Tripulaciones aéreas y de superficie de la Guardia Costera buscan activamente personas en el mar. Este es una hecho sospechoso de contrabando de personas», dijo el comunicado de esa fuerza .
Los traficantes de personas usan las Bahamas como punto de partida para transportar personas a EEUU, muchas de ellas procedentes Haití y otros países caribeños.
Según la Organización Internacional para las Migraciones, entre 20.000 y 50.000 haitianos viven ilegalmente en Bahamas.