En un camión montaron la mercancía de un adjudicatario que desalojaron del Mercado Municipal de Maiquetía, quien pese a que buscó ayuda en los organismos públicos, los esfuerzos fueron en vano. El superintendente del mercado fue quien encabezó el trabajo, apoyado por cuerpos policiales.
“Ya no sé a dónde más acudir. Tengo que venir a diario a Caracas, puesto que mi madre sufre de Alzhéimer y está en un estado avanzado. Continuo atendiendo este negocio que es familiar y cuando no estoy yo, lo cuida mi prima. Este local tiene 65 años en manos de la familia», expresó Edgar Villasana.
Al consultar al superintendente con respecto a la acción de desalojo, solo expresó que era un trámite administrativo y que no daría otras declaraciones.
Villasana pidió que fuera respetado su derecho al trabajo digno y que se hiciera valer el decreto presidencial sobre no desalojar a los comerciantes durante 6 meses debido a la pandemia.
Recalcó que estará laborando en la calle, pues que nos le queda más opción para llevar la comida a su hogar.RM/jd