La realidad que viven 40 mil pensionados de Vargas es terrible y es que debido a la pírrica asignación que perciben mensualmente que es de Bs. 7 millones, esto apenas alcanza para comprarse un pedacito de queso, por lo que están pasando hambre.
La información fue suministrada por Asdrúbal Salazar, presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionados de Vargas, quien resaltó que tampoco pueden comprar sus medicamentos y hay que tomar en cuenta que la mayoría padece de enfermedades crónicas.
«Tenemos previsto marchar hasta la Defensoría del Pueblo, en donde vamos a entregar un documento que recoge las calamidades que estamos pasando y además estamos exigiendo soluciones, un incremento de la pensión que sea suficiente para cubrir nuestras necesidades».
Expresa que se han declarado en asamblea permanente y también reclaman la segunda dosis de la Sputnik, así como la primera para quienes aún esperan. “Deben establecer prioridades y los adultos mayores somos los más vulnerables»./BR/jd