En la conocida vuelta de los autobuses en La Soublette, Catia la Mar, hay conductores que colocan música a todo volumen, lo que molesta a los vecinos de los alrededores, quienes en varias oportunidades han solicitado que disminuyan los decibeles, petición que ha sido en vano.
A pesar de haber un módulo de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en las cercanías, estos funcionarios alegan que no esta dentro de sus funciones el pedirle a los conductores que bajen la música, pues no es su trabajo, asegura José León, quien en varias oportunidades les ha solicitado que resuelvan la problemática. “Mi madre tiene 100 años y la música la comienzan a colocar en horas de la noche, cuando llegan los transportistas a lavar sus autobuses”.
Los vecinos hacen un llamado al secretario de Seguridad Ciudadana, Andrés Goncalves, y las demás autoridades, para que se aboquen en dar una solución, porque a juicio de los denunciantes, es una violación a la Ley de Convivencia Ciudadana./WMA/ep