* La goleada 3-0 metió a los europeos en octavos de final del Mundial
Una falla garrafal del arquero Wilfredo Caballero, en otro día triste de Lionel Messi, y una genialidad de Luka Modric encaminaron a Croacia a una victoria por 3-0 sobre Argentina que la clasificó a la segunda ronda del Mundial y dejó a la Albiceleste al borde de la eliminación.
Ante Rebic abrió el marcador a los 53 minutos tras recibir un regalo de Caballero, que jugó mal un balón con los pies y se lo dejó servido en el área para que lo fusilase. Modric aumentó a los 81 con un remate desde afuera del área que entró junto a un palo e Ivan Rakitic marcó el tercero en el descuento.
Croacia, que venía de ganarle 2-0 a Nigeria, se aseguró el pase a los octavos de final por el Grupo D, mientras que Argentina, que en su debut apenas pudo empatar 1-1 con Islandia, está ahora obligada a ganarle a Nigeria en el cierre de la primera fase y esperar que se den otros resultados. Ya no puede ser primera en su grupo.
El equipo argentino salió con tres cambios respecto al equipo que jugó contra Islandia, pero no hicieron nada por potenciar su ataque. Messi siguió aislado, sin socios con quien jugar y sin casi tocar el balón.
Argentina tuvo una oportunidad dorada de anotar hacia la media hora, cuando una desinteligencia defensiva de los croatas dejó a Enzo Pérez solo en el medio del área, con el arco vacío, pero el mediocampista tiró afuera.
En un choque con mucha marca, Croacia fue levemente más punzante y logró ganarle la espalda a la zaga argentina varias veces con buenos pelotazos.
A poco de comenzado el encuentro, Caballero desvió con esfuerzo un remate de Ivan Perisic y hacia el final del primer tiempo Mario Mandzikic cabeceó levemente desviado.
Después del gol croata, el técnico argentino Jorge Sampaoli puso toda la carne en el asador, enviando al terreno a Paulo Dybala, Gonzalo Higuaín y Cristian Pavón.
Argentina quedó muy expuesta al contragolpe y no sorprendió que Modric aumentase con su bombazo ante una defensa argentina muy pasiva.
A cuatro minutos del final, Rakitic estrelló un tiro libre en el travesaño y en el descuento coronó un contragolpe marcando el tercero.