Icono del sitio Diario La Verdad de Vargas

Crisis social estimula casos de violencia escolar

* Patrulleros de disciplina escolar podrían incidir en la disminución de casos de violencia en las instituciones

Damarins Díaz – En las instituciones públicas, el índice de violencia escolar es mayor porque agrupa a una gran cantidad de estudiantes de diferentes sectores populares. Entre las causas de los actos violentos destaca la crisis social y de inseguridad en el país.

El profesor y presidente del Sindicato de Trabajadores Educativos de Vargas (Sitravargas), Raúl Yemiñame, indica que la crisis social que actualmente vive el país, está afectando de manera directa a los jóvenes en edad escolar, esto por los constantes actos de violencia de la colectividad cuando van a adquirir productos y comida o cuando una persona es robada frente a los transeúntes.

El docente pide a los padres de familia que recuerden que la crisis tiene una raíz cultural. Asegura que lo primero que se debe hacer, es dar charlas a los estudiantes sobre las causas y consecuencias de la violencia escolar. “Los muchachos deben tener conocimientos en sus manos, hay que educarlos de manera, que sin importar de donde provengan, eviten caer en actos violentos”.

Yemiñame recomienda a las instituciones públicas y privadas crear una comisión de patrulleros escolares que se encargue de vigilar la disciplina de sus compañeros. “Darles una responsabilidad, los hace comprometerse para mantener una conducta ejemplar, donde el estudiante que tenga mal comportamiento, se acoplará al ritmo de sus compañeros”.

La institución en el estado con mayor índice de violencia escolar es el Liceo José María Vargas, esto motivado a la falta de profesores que cubren la demanda de las cátedras, lo que hace que el estudiante se mantenga en la institución con un tiempo de ocio prolongado. También radica en la educación y valores inculcados en casa.

Los estudiantes se retan

El presidente del sindicato manifiesta que en el caso de Liceo Vargas, los alumnos están compartiendo sede con estudiantes de la Unidad Educativa de Talento Deportivo Vargas. “Constantemente están en una competencia o rivalidad, esto está influyendo en los casos de violencia escolar”. Hace cuatro meses aproximadamente una estudiante del cuarto año de bachillerato del Liceo Vargas fue herida por un compañero de clases quien le propinó tres puñaladas que le dejaron 76 puntos a la joven, quedándole el miedo de asistir a clases y las ganas de retirarse de la institución, para intentar poner un alto al bullying por parte de su agresor”.

En este caso, la afectada continuó estudiando con su agresor, quien dio a conocer que al intentar poner una denuncian en contra de su compañero de clases, ésta no procedió porque se trató, para las autoridades de la institución, de una riña escolar.

Un cambio de ambiente

Yemiñame dice que cuando se registran estas situaciones, al agresor se le debe garantizar el derecho al estudio, pero es necesario hacerle un traslado a otra institución. A esto se le denomina cambio de ambiente, contemplado dentro del Manual de Convivencia de las instituciones escolares, donde se le da la oportunidad al agresor de empezar de nuevo y se le brinda tranquilidad al agredido./jd

Salir de la versión móvil