Luisana Brito.- A pesar de que playa Los Cocos, en Caraballeda, es considerada una de los puntos de referencia turística de la región porque, entre otras cosas, se llevan a cabo competencias deportivas, se encuentra repleta de basura.
Comerciantes playeros informan que desde hace mes y medio no cumplen con el servicio de la recolección de desechos, razón por la cual consideran que ha causado una baja en la demanda de visitantes.
Alexander Vargas, miembro del comité playero, señala que los malos olores proliferan por toda la zona, produciendo descontento entre los temporadistas, ya que el camión que hace el servicio tarda mucho tiempo en pasar.
“Cuando llegan los usuarios y ven las condiciones en las que está la playa, se van. Siempre está una cuadrilla recogiendo la basura y la depositan en bolsas. Cada vez hay más desechos de los kioscos y los perros rompen lo que se ha recogido. Los alimentos descompuestos generan una putrefacción horrible”.
Por su parte, José Monasterios, manifiesta que la zona ha bajado de calidad por el foco de contaminación en el que está sumergida y sin embargo las autoridades no hacen nada para proyectar el turismo. “Esta playa está olvidada por las autoridades, es notorio las mejoras que hacen en otros balnearios y éste queda a un lado, es como si no existiéramos. Aquí vienen profesionales de la tabla de surf y nosotros no tenemos nada que ofrecer, salvo contaminación. Esto da pena”.
Roban cableado de la electricidad
La falta de vigilancia permanente por parte de los funcionarios de seguridad, facilita que durante las horas nocturnas amigos de lo ajeno se roben el cableado de la electricidad. Es por ello que los comerciante exigen al Gobernador tomar cartas en asunto, a fin de mejorar el servicio en las instalaciones.
“Cinco comercios se quedaron sin luz porque aquí no hay quien ponga mano dura. Esto no puede ser porque nosotros hacemos el sacrificio para mantener la playa en buen estado para que vengan los foráneos a hurtar lo que hemos logrado. Ahora entre nosotros tenemos que reparar los daños de nuestros bolsillos y la situación está muy difícil”, señala Castro Martínez. LB/jd