Consumidores aguantan su cola para no comprar a “revendedores”
*Depósitos de establecimientos siguen sin inventario porque lo poco que llega se agota en horas
María E. Moreno – Desde hace un par de años hacer cola para comprar productos como harina de maíz, leche en polvo, pañales y aceite se ha vuelto parte de la cotidianidad. Los consumidores alegan que prefieren aguantar bajo el sol que pagar el triple a los bachaqueros por los productos básicos.
Los encargados aseguran que los despachos son frecuentes, el abastecimiento de los comercios dice todo lo contrario. Estas compras nerviosas han causado que desde hace bastante tiempo en los depósitos no haya inventario y que lo que se vea en anaqueles es lo que llega en los camiones de distribución.
Este viernes, como todos los días, se armó una larga cola en el supermercado Tres Estrellas de Catia la Mar, una similar se formó en la Distribuidora 93 y, en días anteriores, también en Naiguatá y Maiquetía. Todas para una sola cosa, comprar harina PAN. En menos de cinco horas se agotaron los bultos.
Ya hasta el atún vuela de los anaqueles. “130 cajas de atún llegaron y se acabaron el mismo día, vendimos de cuatro por persona. Cada vez están más pelados los negocios porque lo que llega sale”, explicó el encargado del supermercado “5 de oro”.
En el supermercado Río Mar de Naiguatá informaron que la semana pasada 2.160 cajas de aceite se acabaron en tres horas y 2.000 bultos de pasta volaron en un tiempo similar. /MEM/ep/Foto: Nelvis Galindo