Hasbely Bolívar
En un acto realizado en la plaza Bolívar-Chávez de La Guaira, este 17 de Diciembre conmemoraron los 191 años de la muerte del Libertador Simón Bolívar.
El ministro de Cultura, Ernesto Villegas, quién fue el orador de orden, recordó que Bolívar falleció a sus 47 años huyendo, con su cuerpo minado por la enfermedad. Resaltó que “todavía no está claro el motivo por el cual murió. Nuestro comandante Chávez hizo esfuerzos supremos para clarificar ese pequeño gran detalle histórico”.
En la actividad estuvieron presentes el gobernador José Alejandro Terán, la primera dama regional María Ramos de Terán, el alcalde Suárez Maldonado y la primera dama municipal Maira Moreno de Suárez.
También asistieron el comandante de la Zodi, Ramón García; el secretario general de Gobierno municipal Froylan Merentes; Alan Daniel Mata, secretario general de Gobierno estadal.
La muerte de un gigante
Según el médico que lo atendió, Bolívar falleció de tuberculosis a los 11 días de su llegada a la ciudad colombiana de Santa Marta en 1930. El Libertador se dirigía a Cartagena, pero el agravamiento de su estado de salud lo obligó a detenerse en esta ciudad.
El 10 de diciembre, Bolívar dicta su testamento. «Colombianos: Habéis presenciado mis esfuerzos para plantear la libertad donde reinaba antes la tiranía. He trabajado con desinterés, abandonando mi fortuna y aun mi tranquilidad. Me separé del mando cuando me persuadí que desconfiabais de mi desprendimiento. Mis enemigos abusaron de vuestra credulidad y hollaron lo que me es más sagrado, mi reputación y mi amor a la libertad. He sido víctima de mis perseguidores, que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo los perdono.
Al desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice que debo hacer la manifestación de mis últimos deseos. No aspiro a otra gloria que a la consolidación de Colombia. Todos debéis trabajar por el bien inestimable de la Unión: los pueblos obedeciendo al actual gobierno para libertarse de la anarquía; los ministros del santuario dirigiendo sus oraciones al cielo; y los militares empleando su espada en defender las garantías sociales.
¡Colombianos! Mis últimos votos son por la felicidad de la patria. Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la Unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro».