La Conmebol declaró campeón de la Copa Sudamericana al equipo brasileño Chapecoense y otorgó el premio Centenario Conmebol Fair Play al Atlético Nacional de Medellín.
A través de un comunicado, la Confederación Suramericana de Fútbol indicó que las decisiones fueron adoptadas por el su consejo de dirigentes.
Ambos equipos se enfrentarían en la final del torneo, pero el 28 de noviembre el avión que transportaba al club brasileño se estrelló en las cercanías del aeropuerto de Medellín, donde fallecieron 71 de las 77 personas que iban a bordo, incluidos 19 futbolistas.
Conmebol señaló que el 30 de noviembre recibió una carta del Atlético Nacional «invitando a entregar el título de la Copa Sudamericana a la Asociación Chapecoense como laurel honorífico».
El gesto representa «un homenaje póstumo a las víctimas del fatal accidente que enluta nuestro deporte», de acuerdo con el documento.
El informe agregó que el título de campeón del Chapecoense será acompañado «por las prerrogativas deportivas y económicas que ello conlleva», es decir, recibirá un premio de dos millones de dólares.
La Conmebol elogió al Atlético Nacional porque «con su actitud ha promovido el fútbol en Suramérica en un espíritu de paz, comprensión y juego limpio en la búsqueda de que los valores deportivos prevalezcan siempre sobre los intereses comerciales».
Finalmente, la Conmebol subrayó que su consejo «ha decidido por única vez otorgar al Atlético Nacional el premio Centenario Conmebol Fair Play consistente en la suma de un millón de dólares».
El domingo, el ministro de Obras Públicas de Bolivia, Milton Claros, informó que las autoridades bolivianas auditarán a la aerolínea LaMia, dueña del avión siniestrado, e investigarán las relaciones comerciales entre la firma y los equipos de fútbol tras el accidente.
LaMia, una empresa de ex militares de la Fuerza Aérea de Bolivia para vuelos chárter, sólo contaba con un avión con certificación para volar y otros dos con placas venezolanas que no estaban certificados.