El Congreso de Estados Unidos aprobó el miércoles una ley para aumentar fuertemente la presión diplomática sobre el gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, señalado de buscar perpetuarse en el poder en las elecciones del próximo domingo.
La Ley Renacer (siglas en inglés de Reforzar el Cumplimiento de Condiciones para la Reforma Electoral en Nicaragua) fue adoptada por 387 votos a favor y 35 en contra en la Cámara de Representantes, tras su aprobación por el pleno del Senado en agosto y las enmiendas realizadas el lunes.
La legislación bipartidista, que fue apoyada por más republicanos que demócratas, deberá ahora ser promulgada por el presidente Joe Biden.
«Estamos siendo testigos del peor asalto autoritario a la democracia en América Latina en décadas, y me enorgullece liderar este esfuerzo para que el Congreso actúe de manera decisiva para que el régimen de Ortega-Murillo sepa que habrá grandes consecuencias para la pseudocoronación de su dictadura dinástica», dijo el senador demócrata Bob Menendez, patrocinador de la iniciativa.
Ortega, un exguerrillero sandinista en el poder desde 2007, se presenta a los comicios del 7 de noviembre junto a su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, frente a cinco partidos derechistas prácticamente desconocidos para los nicaragüenses.
La oposición ha quedado excluida: 7 precandidatos presidenciales están detenidos y 3 partidos fueron ilegalizados.