El gobernador del estado Mérida, Ramón Guevara, confirmó el martes 12 fallecidos en el municipio Tovar, debido a las torrenciales lluvias que han causado derrumbes e inundaciones. En horas de la tarde se reportaron otros siete decesos en distintos puntos del estado.
La cifra de muertos en toda la entidad asciende a 20 sumando el fallecimiento la noche del lunes de una niña de 6 años y un niño de 10 en el municipio Antonio Pinto Salinas, cuando se derrumbó su casa en el sector Mirador.
La Arquidiócesis de Mérida informó que fue encontrada sin vida la madre del presbítero Darwin Ramírez, párroco de San Francisco en Tovar, quien iba junto a él, su cuñada y su sobrino dentro de un vehículo cuando fue arrastrado por las torrenciales lluvias. El único que pudo salir del carro fue el religioso.
Los sectores tovareños más afectados fueron Monseñor Moreno, El Corozo, Sabaneta y San Francisco.
El servicio eléctrico permanece interrumpido debido a los graves daños que sufrió la subestación, tampoco hay servicio telefónico y permanece cerrado el paso hacia el Valle del Mocotíes ya que los derrumbes han bloqueado todas las vías.
Las precipitaciones han causado estragos en Ejido, donde el alcalde Simón Figueroa informó sobre el desbordamiento del río Montalbán, reseñó Caraota Digital.
En los municipios Antonio Pinto Salinas y Sucre hay 60 viviendas con pérdida total, más de 400 familias afectadas y más de 70 kilómetros de vialidad seriamente dañada.
Ante el estado de emergencia que vive el estado, el cardenal Baltazar Porras, expresó: «Hacemos un llamado a la solidaridad y la oración por los fallecidos y damnificados por el deslave en la zona del Mocotíes, estado Mérida. Caritas nacional y arquidiocesana se han movilizado. Dios bendiga a nuestra gente».