-¿Qué hago con 14 bolívares, cuando un kilo de carne cuesta 16 bolívares?
Se pregunta un jubilado pro oficialista, a la salida del banco en el cual cobró la pensión de diciembre y el segundo aguinaldo de 2021, equivalentes a 3 dólares con 13 centavos.
La cantidad contrasta con la pensión que pagaba el gobierno en el año 2009: 450 dólares mensuales, lo cual nos coloca en un grave peligro de desnutrición en nuestros adultos mayores, quienes por cuestiones de edad tienen que comprar además de alimentos, medicinas de forma habitual.
Pero, ¿está en conocimiento el gobierno de que la canasta alimentaria se ubicó en 343 dólares, según reveló el Observatorio Venezolano de Finanzas la semana pasada?
Sí, el gobierno lo sabe. Está en conocimiento mejor que cualesquiera otros institutos privados, porque tienen cientos de expertos en economía y finanzas, quienes le mantienen al tanto del movimiento de la economía, incluidos los ingresos por las remesas enviadas por los familiares en el exterior a los venezolanos que resisten en el país en medio de las dificultades, con la esperanza de que el gobierno cambie su política o que la política cambie al gobierno.
Urge una sinceración económica por parte del gobierno de Nicolás Maduro, que se ubique en la realidad de un país que, como cualquier otro, vota y coloca su destino, temporalmente, en las manos, mente y espíritu de los candidatos que mejor representan, en su imaginario al menos, sus propios intereses y anhelos de mayores oportunidades de crecimiento y en una mejor calidad de vida, para ellos, para sus hijos y su entorno.
Necesitamos que se cumpla con la prometida justicia social, con la igualdad de oportunidades y una mejor distribución de la riqueza, todas promesas de quienes hoy gobiernan al país con las mayores reservas petroleras del mundo, el quinto en reservas de gas y el quinto también en reservas de oro, allí en el arco minero.
¡¿Qué se hace con 14 bolívares?!
No se necesita ser un experto en economía, ni trabajar en el Banco Central ni en el Ministerio de Finanzas para saberlo.
El kilo de carne está en 31 bolívares (7 dólares) con eso se podrían comprar 451 gramos de carne o completar parta comprar un cartón de huevos que cuesta 16.40 (3.66).
Los otros precios son:
1 Kilo de pernil 38,64 ($8,64)
1 Costillas de cochino 38,64 ($8,64)
1 Chuleta ahumada 36,28 (8,11)
1 kilo de solomo 28,52 (6,38)
1 kilo de café Bs.28 ($6,26)
1 kilo de tocino 23,36 (5,22)
1 kilo de hígado de res 22 ($4,92)
1 k de queso blanco Bs.18 ($4)
1 litro de aceite 17 (3,80)
1 kilo de chorizo 12,60 (2,81)
1 kilo de pollo 12,42 (2,78)
1 kilo patas de pollo 10,12 (2,26)
1 kilo de azúcar Bs.6 ($1,34)
1 harina de maíz 5,50 (1,23)
1 kilo de arroz Bs.4,80 ($1)
¿Qué como hacen para dar el vuelto en céntimos cuando no hay monedas fraccionadas? Ya usted sabe, se redondea hacia arriba y sale perjudicado, otra vez el consumidor, que trata de rendir sus reales, pero todo se lo ponen en contra. ¿Y cuándo es en dólares? Peor.
Estos precios indican a las claras que hace falta un aumento salarial para los trabajadores activos, los pensionados y jubilados, porque ellos necesitan comer y no están comiendo ni siquiera quienes reciben remesas, porque la mayoría de los venezolanos en el extranjero han sido afectados por la caída mundial de la economía, que se traduce en reducción de oportunidades y en muchos casos transar una reducción de salario para conservar el empleo.
El gobierno del Presidente Obrero tiene un compromiso mayor que cualquier otro gobierno en el mundo, con los trabajadores, especialmente con los de Vargas, que hoy padecen una de las mayores tasas de desempleo del país, por el cierre de la empresa empaquetadora de alimentos Salva Foods, la administradora del puerto Teixeira Duarte, que hoy está en un limbo por desencuentros con el gobierno; la reducción de las actividades portuarias y aeroportuarias y la caída de la actividad del turismo internacional por efectos de la pandemia y el turismo interno por la aguda escasez económica que impide que el 90 por ciento de los habitantes puedan disponer de recursos para comprar ropa o calzados, menos para esparcimiento.
Con la reconversión de 2018 vino el aumento salarial a medio petro, la moneda virtual creada por el gobierno, que no ha tenido mayor aceptación, pero existe, equivalente a 30 dólares, con esta tercera reconversión los trabajadores esperaban una medida similar, y aún la están esperando.
El gobierno tiene la palabra, en estos tiempos de eliminación del 7 por 7 y de navidades prolongadas.
Rómulo Herrera