*Vecinos piden al alcalde Terán culminar los trabajos que iniciaron en la gestión anterior
Con el Jesús en la boca viven los vecinos de la comunidad de El Tigrillo, parroquia Naiguatá, debido a que la pasarela todavía está inhabilitada. Destacan que ya iniciaron las clases y los estudiantes deben cruzar la calle con el temor de ser atropellados, ya que los vehículos no se frenan para ceder el paso.
Luisana Brito.-
Piden al alcalde José Alejandro Terán culminar los trabajos que inició la anterior gestión del municipio en mayo de 2017, cuando retiraron las láminas del piso y la escalera sentido oeste. Las refracciones en el sitio solo duraron dos meses y la cuadrilla de Imvitracv se dio a la fuga.
“Los muchachos cruzan de la mano de sus padres, pero siempre hay conductores imprudentes. Esta pasarela tiene más de un año que no le hacen mantenimiento, ahora se llevaron la escalera y sin saber para cuándo la van a colocar. Esta es una zona costera y el salitre acaba con todas las estructuras de metal en cuestión de meses”, dijo Mariwic Hidalgo.
Mientras la municipalidad toma las riendas de la obra, piden la presencia de un funcionario de Tránsito Terrestre. “Necesitamos un efectivo que esté aquí en el día para que controle el tránsito y esté al pendiente de los niños al cruzar y de los abuelos, que caminan muy lento”./va