El presidente de Colombia, Iván Duque, instó este domingo a Panamá a resolver de manera conjunta e “inmediata” la situación en la frontera, donde hay miles de migrantes varados en el lado colombiano a la espera de continuar su tránsito hasta Norteamérica.
Desde hace más de una semana en un municipio colombiano cercano al Darién, la selva que hace frontera entre ambos países y es considerada una de las rutas migratorias más peligrosas del mundo por las características ambientales y la presencia de grupos ilícitos, entre 10.000 y 15.000 migrantes están a la espera de poder continuar su camino hacia Panamá y llegar a EEUU o Canadá.
Duque explicó que dicha cooperación requiere que su país pueda «hacer interdicción temprana para que no se presenten estos fenómenos y saber quiénes están detrás de esta movilización», pues los migrantes «no llegan por carretera, muchos llegan por barco y hay personas que cobran recursos importantes».