La mañana de este martes, la tanquilla ubicada en la recta de Tanaguarena, Caraballeda, específicamente frente a los edificios de la Opppe-26 y la parada de los autobuses que cubren la ruta Caribe-Catia La Mar, colapsó, ocasionando congestionamiento vehicular y descontento entre los presentes, pues las aguas derramadas emanan olores desagradables.
Vecinos y comerciantes explican que días anteriores observaron a una cuadrilla de mantenimiento de Hidrocapital perforar un hueco frente a la estación de servicio Pdvsa y colocar una tubería, sin embargo desconocen el porqué de estas labores.
“Al amanecer nos dimos cuenta que de la alcantarilla estaba saliendo agua sucia, con presión y malos olores. No sabemos a qué se debe, y lo primero que hicimos fue llamar a Hidrocapital para reportar la situación, pero como siempre no saben dar respuestas. Los motorizados tratan de buscar la manera de pasar entre los vehículos para no mojarse, trancándose entre ellos mismos”, informa Marian Viera.
Señala que los peatones no pueden hacer uso del cruce, ya que el bote de aguas putrefactas está ubicado cerca del rayado peatonal, por lo que lo usuarios que esperan por el transporte público son bañados con el líquido. “Tenemos que caminar una cuadra más abajo, donde está el semáforo para poder cruzar sin ensuciarnos. Cuando los usuarios esperan el autobús, los carros que vienen a altas velocidades los mojan, es una situación desagradable”. LB/ep