La adquisición de insumos médicos y quirúrgicos se ha convertido en una odisea debido a que el gobierno no termina de pagar las divisas, informan fuentes de algunos centros privados.
Aunque aclaran que sus pedidos los realizan a distribuidores nacionales, a éstos se les complica el proceso de importación, situación que los afecta, explicó la regente de farmacia, Mónica Hernández.
Se han visto en la necesidad de comprar insumos de marcas y procedencia que, a su juicio, “son de calidad dudosa”, lo que a la larga sale más costoso y provoca pérdida de tiempo y de calidad del servicio.
Materiales escasos
Las vendas, cepillos quirúrgicos y el gas anestésico son algunos de los materiales médicos que han tenido que conseguir de la calidad no deseada. Similar pasa con los equipos de limpieza especiales para el quirófano, dentro de las fallas que existen en la oferta, añadió.
“El suero fisiológico está escaso, por lo que se ha tenido que remitir pacientes a otros centros de salud, por no contar con los insumos necesarios para garantizar exámenes, y atención por un periodo de tiempo prolongado”.
Precio elevado
Los precios se han disparado en comparación con el año pasado debido al incremento del valor de las divisas preferenciales.
“Ante la escasez de divisas y la necesidad de trabajar para no cerrar, algunos han recurrido al mercado paralelo, lo que aumenta los costos”, cuestión que muchos pacientes y sus familiares a veces no pueden comprender, comenta.
Los materiales de mala calidad, cuestan igual o más que los que se adquirían antes dentro de los estándares de calidad, según el conocimiento médico, dice.//WM./rh/Foto: Elizabeth Escalante