Después de tres días sin energía eléctrica, los vecinos de las Lomas de Tanaguarena tomaron la determinación de cerrar el viernes pasado la vía que conduce a Naiguatá.
Resaltaron que son 600 familias las afectadas y a pesar de haber denunciado la situación no han recibido repuesta. «Los alimentos se nos dañaron y tenemos días sin dormir».
Expresaron que cuando no es una cosa es la otra, los apagones y bajones son constantes, por lo que exigen soluciones concretas porque viven en constante zozobra.
Al lugar de los acontecimientos llegaron efectivos policiales para mediar con ellos y tratar de persuadirlos, no obstante los vecinos permanecieron en el lugar a la espera de un representante de Corpoelec que diera respuesta al problema que los afecta./BR/jd