Lorena Correa.- Debido a que constantemente son víctimas de los delincuentes, los conductores de la ruta Caracas-La Guaira se encuentran atemorizados y claman por más seguridad en las paradas y terminales.
Joan Castillo, afirma que en Capitolio y Gato Negro se deben reforzar los puntos de control y verificación, para disminuir el ingreso de atracadores a las unidades. Asegura que en horas de la noche, las paradas quedan sin vigilancia policial y están a merced del hampa.
“No podemos darnos a la tarea de revisar a cada pasajero que aborde un bus, porque en eso se nos iría el día. Además, los robos son el pan de cada día y las autoridades parecen hacer caso omiso a las constantes solicitudes, no solo de los conductores, sino también de los usuarios, que están cansados de ser objeto de robos”.
El mayor temor de los trabajadores es perder la vida buscando el sustento de su hogar. Destacan que antes los robaban solo con amenazas, ahora lo hacen con pistolas o cuchillos.
Hasta cinco robos diarios
Raúl Rojas, secretario de la organización Malavé Villalba, explica que entre tres y cinco robos diarios son denunciados por parte de los choferes.
“Hasta la fecha solo dos conductores han resultado heridos con golpes en la cabeza, sin contrariedades mayores. Hasta marzo se contabilizaron un total de 40 robos”.
Resalta que los organismos de seguridad en Vargas están apoyándolos para disminuir los hechos delictivos. “A pesar de las medidas tomadas, hace falta reforzar los operativos en todas las paradas y terminales de Caracas. Debe existir más presencia policial en las vías, además de aumentar los puntos de control en los zonas estratégicas”.
20 unidades paradas por falta de repuestos
Aprovecha la oportunidad para hacer un llamado al Gobierno nacional para que se busquen mecanismos que solventen la crisis de repuestos. Resalta que 20 unidades, de las 190 que integran la flota, permanecen paradas por falta de repuestos.
“Queremos una mayor calidad de vida. No es justo que un caucho hace dos meses costaba 8 mil bolívares y ahorita cuesta 25 mil, vamos de mal en peor”. LC/ar