El Gobierno de Chile propuso acordar «cuotas de refugiados» entre los países de la región ante inminente éxodo de migrantes venezolanos.
La ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, anunció que su país no cerrará sus fronteras. “Lo que puede pasar es que se incremente (el flujo migratorio) y que alcance dimensiones mucho mayores. Y para eso nos tenemos que preparar y tenemos que aprender también las lecciones”, sostuvo la ministra, de acuerdo a lo reseñado por medios locales.
“El país tiene que tener una capacidad de controlar las personas que entran, y eso no lo podemos hacer, además, solos, en el aislamiento. Tenemos que hacerlo en colaboración con otros países”, apuntó.