César Alonso: Reforma del TSJ busca equilibrar la administración de justicia
María Lourdes Arráez.- “En la gran mayoría de los países los tribunales constitucionales tienen de doce a quince miembros, aquí busca llevarlos a quince, más allá de cualquier otra cosa, es darle a la sala constitucional del Tribunal Supremo de Justicia el perfil para administrar justicia con equidad, imparcialidad y autonomía”.
Manifiesta que los magistrados deben administrar justicia sin hacer concesiones ni particularidades a quien tenga de manera circunstancial el poder del Ejecutivo Nacional, pues un funcionario debe guiarse por la Constitución y leyes de la República.
“En el 2004 se hizo un aumento de magistrados por la bancada del PSUV y no trajo ninguna situación en el país, los diputados estamos actuando en conformidad a las leyes, no se está haciendo nada anormal”.
Resalta que es vital que vuelva el sentido de objetividad, claridad y transparencia al TSJ, para que no siga siendo el despacho privado de Nicolás Maduro y de su abogado Calixto Ortega.
“La sala constitucional de los últimos tres meses se ha convertido en un tapón para el país, no se puede avanzar con una sala cuyo fin último es sabotear y obstaculizar cualquier iniciativa que la Asamblea Nacional emprenda en pro de las necesidades que el país tiene”.
Destaca que la única manera de equilibrar la situación es exigiendo un aumento de los magistrados, “para que no se sigan prestando a cumplir los designios de su jefe, su patrón, porque son lacayos de quienes allí lo pusieron para eso”.
“Desde el momento que se hicieron las designaciones era con esta intención, fue un plan orquestado desde que supieron que iban a perder las elecciones, buscaron blindarse para operar, reeditando lo que era el sistema bicameral, para que un grupo de jueces sin moral ni las herramientas necesarias administraran justicia”.
Asegura que saben que tienen preparado un documento contra la reforma de la Ley del Banco Central de Venezuela, porque les interesa que se siga manejando al banco como una pulpería y una caja negra, “continuarán de espaldas al pueblo, arrodillados ante su patrón, cumpliendo lo que les designen hacer, no creo que la sala constitucional la controlen los magistrados”. MLA/iv