–Muchas de las actividades en homenaje al artista fueron desechadas
Laura De Stefano
Hoy se cumple un año más del natalicio de Armando Reverón; y uno de sus mayores legados, El Castillete, se encuentra abandonado desde hace 18 años, cuando el deslave lo arrasó.
«Se olvidaron nuevamente de Armando Reverón. Da lástima decirlo. Después de haber trasladado sus restos al Panteón Nacional, los señores de la cultura no le dan importancia a su legado. ¡Es pura burla!”, manifestó Nelson Galvis, vocero de Contraloría Social de El Castillete Armando Reverón de Las 15 Letras.
Comentó que la promesa presidencial de recuperar El Castillete quedó en el olvido, y que todos los años es lo mismo, nunca terminan de recuperar esos espacios donde el Maestro de la Luz concibió su obra pictórica de reconocimiento mundial en el campo de las artes plásticas.
Recordó que en asambleas de vecinos de Macuto, a las cuales asistieron miembros de otras parroquias, se decidió hacer una réplica. Sin embargo, el proyecto no coincide en lo más mínimo con lo propuesto en asamblea y fue totalmente modificado.
“Reverón construyó su Castillete con sus propias manos. Colocó piedras sobre piedras, que eran seleccionadas cuidadosamente para lograr esa simetría que tenían esas paredes. Pero lo que hicieron fue colocar bloques de cemento.”
Galvis señaló que el verdadero caney del artista tenía doble piso, donde Reverón colocaba sus muñecas y utensilios de pintura. Actualmente está cerrado, lleno de maleza y lo circundan aguas negras de una cloaca que se reventó. La Gobernación se comprometió en canalizarla; no obstante, lleva dos años en la misma situación.
“Un espacio para la cultura en pleno olvido, y tanto que hablan de la revolución cultural para el pueblo. Queremos señalar que se encuentra en el baúl de los recuerdos la Orden Armando Reverón, en sus tres clases, un reconocimiento a nuestros artistas regionales que la Alcaldía y la Cámara Municipal tienen cuatro años sin entregar”.
Recordó que todos los 10 de mayo, la Asociación de Vecinos de Las 15 Letras celebraba ese día con una misa en la iglesia San Bartolomé y un desfile escolar hasta la plaza Armando Reverón, donde está el busto del artista. Allí se le rendía un gran homenaje.
En la noche, en El Castillete se celebraba la fiesta de Cruz de Mayo como lo hacía el maestro. “Todas esas actividades que se realizaban fueron desechadas y metidas en el baúl del olvido por las autoridades gubernamentales”, puntualizó./va