«En el Puerto de La Guaira hay pocas señales de importación para la época decembrina y la mercancía que se moviliza corresponde a inversionistas comprometidos con la revolución», expresa Rusvel Gutiérrez, presidente de Caduainco.
Indica que la baja en las importaciones ha sido significativa, mientras que las exportaciones prácticamente están en cero.
Resalta que a pocas semanas para navidad, los productos tradicionales podrían quedar en veremos ya que a los importadores le siguen poniendo muchas trabas para traer la mercancía y la permisología se hace eterna.
A esto suma la falta de seguridad para hacer las importaciones y tener acceso a los procedimientos portuarios.
Destacó el creciente desempleo del sector aduanero. «De 4.500 trabajadores solo quedan 200, personas calificadas y preparadas en el área que hoy están desempleados o realizando otros oficios».
Refiere que los movimientos de importación y exportación son indispensables para mover la economía de un país. «Venezuela vive en gran parte de un inventario de larga data y con este se mantiene la circulación de bienes en el mercado»./BR