El rey Carlos III y su esposa, la reina Camila, fueron coronados formalmente el sábado en una ceremonia histórica en la Abadía de Westminster en Londres.
La ceremonia, estuvo marcada con algunos pequeños ajustes para la era moderna, por ejemplo, se desarrolló frente a unos 2000 invitados y una audiencia global de millones de personas que la vieron en vivo por televisión.
Carlos III recibió la corona por parte del arzobispo de Canterbury, quien puso la pesada corona de oro y joyas de San Eduardo sobre la cabeza del monarca durante la misa que se extendió durante dos horas.
Primero, el rey se dirigió a cada uno de los cuatro puntos cardinales antes de que el arzobispo lo proclamó “Rey indudable”, al tiempo que la congregación gritó “‘¡Dios salve al rey Carlos!”.
El protocolo indica que después de la ceremonia, Carlos cambiará la corona de 2,08 kilogramos (4,6 libras) por la Corona de Estado Imperial, que pesa aproximadamente la mitad, para la procesión de regreso al Palacio de Buckingham.
Por su parte, Camilla fue coronada en una ceremonia más breve y sencilla después de la coronación de Carlos; recibió la corona de la reina María, siendo la primera vez que se utilizó una corona existente para la coronación de la reina consorte.
Durante la misa tradicional anglicada, Carlos, con mantos carmesí y crema juró ante la Biblia que es un “verdadero protestante”, asimismo, por primera vez, se agregó un prefacio al juramento de coronación para decir que la Iglesia de Inglaterra “buscará fomentar un ambiente donde las personas de todas las religiones y creencias puedan vivir libremente”.
La coronación del rey Carlos III fue más corta que la coronación de la reina Isabel, debido a la edad del rey y un reflejo de una monarquía más moderna, pero las celebraciones se extenderán por tres días, hasta el lunes 8 de mayo.
Tras terminar la ceremonia, sus majestades regresaron al Palacio de Buckingham en una procesión ceremonial más grande, conocida como “La Procesión de la Coronación”, mientras que el domingo 7 de mayo será el Concierto de Coronación en el Castillo de Windsor, un evento público al que asistirán voluntarios de las numerosas organizaciones benéficas de el rey y la reina Consorte.