Los filtros de aire y de gasoil que utilizan los busetas no se consiguen por ninguna parte, lo que genera una gran humareda en los buses.
Juan Villarroel, conductor de Catia la Mar-Caribe, señala que las calles de Vargas cada día están más contaminadas a causa de las emisiones de humo de las unidades por los altos precios y la escasez de estos filtros.
“El mantenimiento debe realizarse una vez al mes, pero ahora solo se hace cada seis meses o cuando se consiguen. La situación escapa de nuestras manos, tanto así que las autoridades lo han entendido porque ya no hacen las pruebas y no nos sancionan. Estamos trabajando como podemos para poder llevar el alimento a nuestras casas”.
Señaló que últimamente los han conseguido en la página web de Mercado Libre y tampoco hay gran variedad. “Los de aire se consiguen en Bs.150 mil cada uno, de motor en Bs. 85 mil y usa cuatro. Para realizar el engrase y lavado son Bs. 35 mil mensual”.