La Abogacía General de la Unión, que representa al Estado brasileño, se pronunció en contra del cierre de la frontera con Venezuela, pedido por el estado de Roraima tras incidentes ocurridos en esa región con inmigrantes venezolanos.
En un documento remitido a la Corte Suprema, a la que el Gobierno regional de Roraima solicitó el cierre «temporal» de la frontera, la AGU argumentó que una medida de esa naturaleza es «manifiestamente contraria al orden jurídico nacional e internacional».
El pedido de las autoridades de Roraima, que intentaron sin éxito una acción similar hace tres meses, fue presentado después de que, este sábado, un campamento de inmigrantes venezolanos fue incendiado por ciudadanos brasileños.
El ataque ocurrió después de que un comerciante de Pacaraima, un pequeño municipio fronterizo, fue agredido por venezolanos, y generó tensiones en esa ciudad que se convirtió en la puerta de entrada a Brasil para unas 50 mil personas del vecino país, que huyen de la crisis política, social y económica que atraviesa Venezuela.
La posición expresada por la AGU refuerza la tesis del Gobierno del presidente Michel Temer, quien ya se manifestó en contra de una eventual interrupción del tránsito en la frontera.