Boric: Migrantes venezolanos son “una presión tremenda”
El presidente de Chile, Gabriel Boric, dedicó gran parte de su discurso ante la 77° Asamblea General de la ONU que se desarrolla en Nueva York, sede del organismo, a repasar el escenario político chileno de los últimos años.
Afirmó que recoge “con los ojos y el corazón bien abiertos” el resultado del referéndum que tumbó el 4 de septiembre el borrador de la nueva Constitución, aunque confía en que el país logrará “a corto plazo” una Carta Magna capaz de garantizar “un futuro de cambio con estabilidad”.
En relación a América Latina, Boric hizo referencia a las principales crisis globales en el mundo. En este aspecto, resaltó la crisis migratoria venezolana como la que más ha impactado en la región. «La crisis humanitaria en Venezuela, producto de su prolongada crisis política, ha generado un flujo migratorio que es inédito en nuestra región».
Destacó cómo esta situación ha afectado a Chile, poniendo una gran presión sobre las instituciones y la sociedad, por lo que pidió a los países del mundo a trabajar para que no se recurra a la persecución o vulneración de los derechos humanos en contra de quienes piensan distinto al gobierno de turno.
Por su parte, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, durante su discurso, exigió el levantamiento de los bloqueos y sanciones impuestas por EEUU a Cuba y Venezuela. “Quiero llamar la atención por la utilización de medidas unilaterales de coerción», en referencia a las sanciones contra ambas naciones caribeñas.
Explicó que «de acuerdo a la Carta de Naciones Unidas, las únicas sanciones legítimas son las impuestas por el Consejo de Seguridad». Las mismas son «para hacer cumplir sus decisiones en materia de mantenimiento de la paz y la seguridad».
El mandatario argentino apuntó que bajo esa premisa «Argentina se suma al reclamo de los pueblos de Cuba.