El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, propuso este miércoles invertir 2 billones de dólares en infraestructura, con el objetivo declarado de crear «millones» de puestos de trabajo y enfrentar a China en el escenario económico mundial y luchar contra el cambio climático.
«Es grande, sí. Es audaz, sí. ¡Y podemos hacerlo!», afirmó el mandatario demócrata, quien desde que llegó al poder hace menos de tres meses busca probar su voluntad de reforma. «Esto creará la economía más resistente, fuerte e innovadora del mundo», agregó, enfatizando que quiere «ganar» la competencia con China.
«Estas son inversiones que no podemos dejar de hacer», subrayó desde Pittsburgh, Pensilvania, donde hace dos años lanzó su campaña hacia la Casa Blanca.
La primera fase de su programa «Build Back Better» (Reconstruir mejor) implica inversiones que se extenderían a lo largo de ocho años y se financiarían con un aumento del impuesto a la renta empresarial del 21 por ciento actual al 28%.
«No se trata de penalizar a nadie. No tengo nada contra los millonarios y los multimillonarios. Yo creo en el capitalismo estadounidense. Estoy abierto a otras ideas», aseguró, siempre y cuando no impliquen aumentos de impuestos a las personas de ingresos más bajos.
Su plan incluye inyectar 620.000 millones de dólares en transporte, modernizar más de 32.00 kilómetros de carreteras y autopistas y reparar unos 10.000 puentes en Estados Unidos, reseñó Deutsche Welle.
Esta nueva ofensiva legislativa llega poco después de que el Congreso aprobara un plan de recuperación para hacer frente a la pandemia de covid-19, también estimado en cerca de unos 2 billones de dólares.
El plan prevé amplificar «la revolución de los vehículos eléctricos» con, por ejemplo, el pasaje a la electricidad del 20% de los famosos autobuses escolares amarillos. También buscará que las nuevas infraestructuras sean más resistentes a los cambios vinculados al calentamiento global.