El presidente de EEUU, Joe Biden, no descartó este miércoles vetar las importaciones estadounidenses de petróleo ruso, y acusó a Rusia de atacar deliberadamente las zonas donde residen civiles en Ucrania.
Apenas el 7% de las importaciones estadounidenses de crudo y productos refinados de petróleo procedieron de Rusia en 2020, según datos de la Administración de Información sobre Energía (EIA, en inglés).
Estados Unidos consigue la mayoría de su petróleo de Canadá y México, e importa también cantidades menores de Arabia Saudí, Colombia o Irak, de acuerdo con la EIA.
No obstante, los precios del petróleo ya han subido en Estados Unidos debido a la negativa de algunas refinerías a comprar crudo de Rusia por temor a las sanciones estadounidenses, a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
La Casa Blanca ha prometido minimizar el impacto de sus restricciones a Rusia en los mercados energéticos globales y en los bolsillos de los consumidores estadounidenses, pero no descarta imponer sanciones al petróleo y gas rusos, según la portavoz de Biden, Jen Psaki.