Barcelona obra el milagro ante PSG
Con un 6-1 remontó el 0-4 de la ida para meterse en los cuartos de final de la Liga de Campeones
Un gol de Sergi Roberto, en el minuto 95, desató la locura en el Camp Nou, donde el Barcelona protagonizó una remontada hasta ahora nunca vista en la historia de la Liga de Campeones, ya que volteó el 4-0 de la ida con un 6-1 tras conseguir tres goles en los últimos siete minutos.
Después de un gran partido y de adelantarse 3-0, un gol de Edinson Cavani en el 62 parecía acabar con las esperanzas de los azulgrana, que necesitaban otros tres goles más para meterse en cuartos de final.
Con 3-1 en el minuto 88, la suerte parecía echada en favor de los parisinos. Pero entonces Neymar acertó en un perfecto lanzamiento de falta (4-1), en la siguiente acción Luis Suárez fue derribado en el área y el brasileño acertó desde el punto de penalti (5-1, minuto 90).
Cinco minutos de añadido dieron para mucho. El Barsa se volcó y, cuando el tiempo se consumía, Neymar puso un balón en el área y Sergi Roberto la puntera para desatar el delirio en el Camp Nou (6-1, 95).
En la primera aproximación del Barsa, a los tres minutos, Luis Suárez demostró su instinto goleador. En una acción embarullada en el área, Thiago Silva no pudo despejar y el uruguayo se adelantó a todos para marcar.
Si el 1-0 llegó en una acción de nueve, el 2-0 se produjo en una acción de fe de Andrés Iniesta, quien fue a buscar un balón en el área y tocó el balón con el talón para ponerlo dentro del área pequeña, donde Kurzawa, que pasaba por allí, introdujo el balón en su portería (40).
Con la mitad del partido jugado, el Barcelona tenía la mitad del trabajo hecho, todo parecía perfectamente calculado, más aún cuando a los cinco minutos del segundo tiempo Lionel Messi marcó el tercero de penalti tras falta a Neymar.
Y luego Cavani enmudeció el Camp Nou. En una acción de balón parado, Kurzawa puso el balón en el balcón del área pequeña y el uruguayo marcó el gol que le daba tranquilidad a su equipo (3-1, 62).
El Barcelona se movía por inercias y no tenía ocasiones claras, pero apareció Neymar, que transformó con maestría una falta para marcar el 4-1 y luego marcó el penal por el agarrón de Marquinhos a Suarez (5-1, 90).
Con cinco minutos para jugar todo era posible y Sergi Roberto obró el milagro, de nuevo en una acción en la que Neymar fue determinante al centrar el balón que el canterano con remató con la puntera para batir a Trapp en el último suspiro del partido.