Barcelona y Celta dejan todo para la vuelta
* Empataron 1-1 en Balaídos en la ida de octavos de final de la Copa del Rey
El Barcelona y el Celta de Vigo aplazaron el desenlace de la eliminatoria de los octavos de final de la Copa del Rey después de empatar 1-1 en Balaídos, en un encuentro en el que el conjunto azulgrana tuvo muchas novedades en su equipo titular.
Ernesto Valverde colocó al joven José Arnáiz como centro delantero, rodeado por Aleix Vidal, Denis Suárez y André Gomes, ante las ausencias de Lionel Messi, Luis Suárez y Andrés Iniesta.
Salió el Celta sin complejos, presto para robarle el balón al Barcelona y marcar el ritmo de partido. E intuyó que solo con velocidad podría cuartear la defensa del equipo menos goleado de la Liga.
Por su parte, el Barsa apeló a la paciencia. No se alteró ante el empuje local y tuvo su recompensa: gol de Arnáiz en un contragolpe de área a área, con el Celta descolocado (minuto 15).
La secuencia tuvo tres jugadores: recuperó la pelota André Gomes en la frontal de su área, buscó a Denis Suárez, que avanzó en la contra y le devolvió el balón al portugués, que aguantó hasta encontrar el centro lateral que el canterano, quien acompañaba la jugada por la zona central del área, remató a la red de pierna izquierda.
Ese gol desajustó el ritmo del Celta, que perdió el control de la pelota y una marcha de su ritmo inicial. Pero se recompuso. Y 15 minutos después, un cañonazo lateral de Sisto se convirtió en el gol de empate.
Tras el descanso, se activó definitivamente al Barsa, que imprimió un ritmo alto, pero no pudo convertir ninguna de las tres buenas ocasiones que tuvo, una de ellas de Ousmane Dembélé, quien entró como suplente en su primer partido tras lesionarse en septiembre.