Baltazar Porras: Iglesia Universal está de luto por muerte del cardenal Urosa Savino
El cardenal Baltazar Porras, expresó su dolor por la muerte de su hermano de fe Jorge Urosa Sabino, quien batalló durante semanas contra el covid-19.
El actual arzobispo de Mérida y administrador apostólico de Caracas dijo que esta muerte no solo enluta a la Iglesia venezolana sino que también a la Iglesia universal.
“Próximamente estaremos informando lo que haremos desde la Iglesia de Valencia, la Iglesia de Caracas y todo el país en este momento de dolor”, expresó Porras.
Un día después de su 39° Aniversario Episcopal, en horas de la tarde de este 23 de septiembre de 2021 falleció el Cardenal Jorge Urosa Savino, Arzobispo Emérito de Caracas, a la edad de 79 años, tras complicaciones a causa de Covid-19, según lo informór Porras, Arzobispo de Mérida y Administrador Apostólico de Caracas.
Urosa fue rector y profesor en el Seminario San José en Caracas; Rector del Seminario Interdiocesano de Caracas y Vicario general de la Arquidiócesis de Caracas, además de fundar un vicariato parroquial en una zona popular de la arquidiócesis, reseñó Efecto Cocuyo.
El Papa Juan Pablo II le designó Obispo Auxiliar de Caracas y titular de la Dioecesis Vegeselitana in Byzacena el 06 de julio de 1982, recibiendo su consagración episcopal el 22 de septiembre del mismo año, por el entonces Arzobispo de Caracas, Mons. José Alí Lebrún.
Benedicto XVI instituye al entonces Mons. Jorge Urosa Savino en la dignidad de Cardenal el 24 de marzo de 2006, en el primer consistorio de su papado, junto a otros 14 obispos.
En días anteriores, se hizo público el Mensaje que el Cardenal Jorge Urosa habría escrito antes de su ingreso a la Unidad de Cuidados Intensivos, en el que expresó “una breve declaración de amo” a Dios, a la Iglesia y al pueblo de Venezuela.
“He tenido la fortuna y la bendición de que Dios me ha llevado por caminos insospechados de servicio y de altísimas responsabilidades en la Iglesia que agradezco en el alma”, afirmaba el prelado. “Nunca he querido hacerle mal a nadie, y siempre he procurado actuar buscando la gloria de Dios y el bien de la Iglesia, de las almas y de las almas involucradas”.
La Conferencia Episcopal Venezolana manifestó su dolor y esperanza cristiana ante el sensible fallecimiento de Urosa Savino y pidieron a Dios “le conceda el eterno descanso, y lo incorpore a la bienaventuranza eterna”.