Con los trabajos de reparación y sustitución de ductos de los aires acondicionados en el Materno Infantil Ana Teresa de Jesús Ponce de Macuto, realizados por la Fundación de Edificaciones y Equipamiento Hospitalario (Fundeeh), ya un 90% de las instalaciones están climatizadas, señalan directivos.
Thays González, subdirectora del Materno, comentó que antes de comenzar la obra el centro solamente se manejaba con aires externos, aires de ventanas y Split. Ahora todo depende de un aire central, incluyendo el lobby, pasillos y consultorios.
Explicó que pese las limitaciones que acarrea la cuarentena, Fundeeh continúa trabajando en la sustitución del techo y la ductería para llegar al 100% del espacio. “Entre las obras que hemos logrado, también está la recuperación de un ascensor, este era bastante necesario, así como el techo del lobby”.
Adelantó que en los próximos días sustituirán el 45% de la iluminación con bombillos ahorradores, por lo que desincorporarán el sistema de lámparas. “Hemos ido recuperando la infraestructura poco a poco, la idea es tener espacios en perfectas condiciones”.
El servicio no ha parado
Pese a la pandemia, los servicios de cirugía general y cirugías pediátricas siguen activos, así como las consultas de pediatría, urología, infectología, endocrinología, odontología y odontopediatría, siempre cumpliendo con las medidas adecuadas de protección ante el virus.
“Aquí hemos hecho cirugías de alta complejidad como prostatectomía, a pesar de que somos un Hospital Materno Infantil. Es un gran logro que hayamos incluido las cirugías de urología, nos satisface haber podido dar respuestas a este tipo de pacientes, entre ellos, algunos que tenían hasta tres años esperando turno en hospitales de Caracas. Todo se hizo de manera gratuita”, aseveró González.
Laboratorio 100% operativo
En el estado son pocos los laboratorios públicos que se encuentran en su completa capacidad de atención por falta de insumos y reactivos. Sin embargo, el Materno cuenta con lo necesario para realizar hematología completa, glucemia, urea, creatinina, exámenes de orina y de heces, PT, PTT y PCR, gases arteriales y gases venosos, electrólitos.
“Estas pruebas son bastante costosas en laboratorios privados”, detalló precisando a la vez que el servicio de radiología fue activado hace varias semanas.
Capacidad de camas e incubadoras es limitada
“Contamos con 32 camas de maternidad. A veces nos vemos en la obligación de dar las altas con anticipación porque la demanda supera la capacidad. Tanto las camas de sala de parto como las camillas se nos llenan con pacientes en recuperación. En ocasiones nos hemos visto en la necesidad de utilizar las camas de quirófano y cirugía ambulatorias”.
Comentó que en neonatología, a pesar de que hay cunas e incubadoras, no cuentan con suficientes tomas de oxígeno de pared, por lo que se ven obligados a colocar dos bebés por incubadoras. “Esto no es lo ideal, pero si nos llegan pariendo no le podemos decir que se vayan”.
La doctora María Ordoñez también agregó que buena parte de las complicaciones están relacionadas con patologías que arrastran las madres. Muchas presentan infecciones urinarias y VDRL positivo, por lo que cuando el bebé nace ya tiene sífilis neonatal, lo que amerita que pasen hasta 15 días recibiendo tratamientos.
“A veces las muchachas se ponen el aparato y se olvidan de que existen las enfermedades de transmisión sexual. Se le transmite al niño y nos complica porque se nos congestionan los cupos”.
Partos y cesáreas durante el año
La subdirectora también mencionó que durante el año se han realizado en el Materno, más de 1.176 partos y cesáreas.
José Ángel Maicabares