Luis López.- Hasta tres robos diarios a choferes y pasajeros ocurren en las unidades de transporte público lo que ha obligado a que estos profesionales del volante limiten el servicio nocturno. “Después de la seis de la tarde se hace imposible mantener el servicio porque los robos han aumentado y las alcabalas se instalan dos o tres días y luego desaparecen. Quedan desamparados es el chofer y los pasajeros”, dijo Carlos Benítez, chofer de la línea Provolvar.
Benítez, con 17 años de servicio como conductor, destacó que el problema de los repuestos y baterías se ha estado resolviendo regularmente de acuerdo a los suministros que hace la proveeduría. “Se cambian los cauchos en la medida que se consigan por esta dependencia, aunque la espera a veces se hace larga”.
Al referirse a los ingresos informó que como mínimo lleva a su hogar cinco mil bolívares diarios, aunque son insuficientes por la galopante inflación. “La cosa esta ruda y cada vez se gana menos para mantener una familia”.
Para quienes acortan la ruta y no llegan a su destino dijo que “son unos desadaptados porque si todos la cumplieran se dispondría de un mejor servicio para el usuario. Tengo mi tarjeta del control que es chequeada en ambas paradas, en el Caribe y en la Soublette, quienes no lo hacen incurren en faltas graves y deben ser sancionados”./jd