El gigante farmacéutico británico AstraZeneca afirmó que la vacuna contra el Covid-19 que está desarrollando con la universidad de Oxford aún podría estar disponible a finales de este año, a pesar de que los ensayos clínicos se hayan pausado.
“Todavía podríamos tener una vacuna para finales de este año o principios del próximo”, dijo el director ejecutivo del grupo, Pascal Soriot, en una conferencia en línea, precisando que dependerá de la rapidez con que los reguladores autoricen la reanudación de las pruebas.
El proyecto de Oxford-AstraZeneca, uno de los más avanzados y que despierta mayores expectativas, vio sus ensayos clínicos interrumpidos el martes debido a la enfermedad por ahora “inexplicada” de un participante. Según trascendió, se trata de mielitis transversa, una inflamación de la médula espinal.
Se está analizando ahora si esto puede corresponder a un efecto secundario de la vacuna y las autoridades reguladoras no autorizarán la reanudación de la investigación hasta que no se haya descartado.
AstraZeneca reconoció el miércoles que ya se había producido una interrupción hace unos meses por un caso similar, pero los ensayos pudieron reanudarse con bastante rapidez.