Wilmer Martínez Añez- Como Mauri Yurden (22), quedó identificada la víctima asesinada de 12 heridas punzo penetrantes, cuando se encontraba en su residencia, ubicada en Bayajá, en la parte alta de La Guaira.
La joven se dedicaba a las labores del hogar y al cuidado de los hijos de algunos vecinos. Dejó a un varón de tres años, y se presume que el autor del hecho fue su ex pareja, quien también es padre del menor.
El hecho ocurrió en horas de la mañana, cuando Yurden se encontraban en el cuidado de dos niños, quienes contemplaron horrorizados lo que sucedía, de acuerdo al relato.
El hombre, quien no vivía con la joven, llegó temprano para llevar a su hijo al colegio y una vez que regresó ocurrió el hecho, de acuerdo a los testimonios de los vecinos.
Uno de los infantes salió de la casa para avisar lo que sucedía, pero no dio tiempo de atrapar al presunto asesino, a quien vieron entrar y salir de la residencia.
El tío de Yurden corrió a la casa porque escuchó el golpe de alguien que se caía. “Pensé que había sido que mi mamá se había caído, pero me encontró con mi sobrina en el piso en un charco de sangre”, relató.
Con lágrimas en el rostro y el llanto de haber perdido a un ser querido, familiares y vecinos claman justicia, y que el culpable de tan atroz hecho sea castigado con todo el peso de la ley.