El inicio de la vida sexual en edades cada vez más bajas y sin ninguna precaución ha traído como consecuencia el repunte de los embarazos en adolescentes.

Esta situación se ve reflejada en los ambulatorios del estado, donde en las consultas prenatales al menos el 50% de las pacientes atendidas son adolescentes de 14 años en adelante.

En el de La Guaira explican que la mayoría de las muchachas que llegan en proceso de gestación iniciaron su vida sexual a los 10 años. “Esto es un fenómeno social que se debe atender, pues se pone en riesgo la vida del bebé y de la madre. El embarazo precoz se toma a la ligera, pero es preocupante”, señalan los obstetras.

Destacan que aunque en los liceos se mantienen las charlas, es fundamental que los padres no caigan en el autoritarismo o en la permisividad y que aprendan a comunicarse con sus hijas e hijos de forma asertiva.

Los especialistas aseguran que la falta de orientación familiar, aunado a la escasez de anticonceptivos, ha incidido en el repunte. Indican que muchas jovencitas acuden a la consulta luego del séptimo mes de embarazo. “Muchas se fajan para ocultar la barriga y afectan al bebé. Es fundamental que acudan a las consultas apenas sospechen que están embarazadas”./DLR/jd