Hacer largas colas desde la madrugada para cargar una pimpina de agua, pagar en dólares para que le llenen una bombona de gas y pasar hasta 14 horas sin servicio eléctrico se han vuelto el día a día de la mayoría de los guaireños.
Así lo aseguró el empresario y luchador social Arquímedes Rivero, ante la mirada indolente de quienes dirigen la administración pública en la región.
Señaló que en los 22 años de revolución muy poco o nada se ha hecho para resolver las carencias en servicios públicos de la población y en algunos casos como el del agua solo han aplicado “pañitos de agua tibia”, como la compra de cisternas, que a largo plazo no solucionan la crisis que padecen los ciudadanos.
Manifestó que todos los esfuerzos se han enfocado en la cinta costera y el estadio de béisbol de Macuto. «El gobierno regional dirigió todas sus inversiones hacía allí, abandonando la inversión social. Vieron un negocio y todos los recursos se han invertido en eso, sin tomar en cuenta las necesidades de las comunidades”.
“Da tristeza ver a las madres de familia padeciendo un calvario para cubrir las necesidades de sus hogares, deben hacer magia para sobrevivir, por eso es hora de una alternativa distinta, que le dé importancia a atender las carencias del pueblo antes de cualquier otra cosa”, puntualizó.
Consideró que es hora de que reine la unidad y que se sumen todos los que realmente quieren a nuestro estado, por eso llamó a los factores políticos que quieren sacar a La Guaira adelante a unirse y sumar esfuerzos para concretar el cambio en la región, asegurando que es necesario que cada uno aporte su talento para poder construir una alternativa que atienda al pueblo./jd