La dificultad para conseguir materias primas, sigue siendo una amenaza para los encargados de areperas y luncherías, donde aseguran haber disminuido levemente su operatividad debido a las carencias. Explican que los precios de los ingredientes aumentaron el doble, golpeando fuertemente sus bolsillos.
María Teixeira, encargada de la arepera El Sol de Pariata, expresó que “la harina de maíz nos la traen los despachadores, a veces no llega, pero por ahora tenemos. Nos bandeamos zanqueando los ingredientes”.
Detalló que es complicado pero reúnen esfuerzos. Lo más caro de costear son los rellenos, pues “la charcutería está cada vez más cara. El queso amarillo supera los 3.000 bolívares, el pernil ni se diga. En el caso de la carne, no pudimos vender con ese relleno para el mes de noviembre, y éste tampoco, porque está cara y escasa”.
Explicó que han dejado de trabajar con mariscos, pues entran en el ranking de los incomprables. “Antes tenía preparados con pulpo y bacalao, pero ahora eso es un lujo”.
Ventas bajas
Aseguró que las ventas han disminuido considerablemente, pues los precios han debido ajustarse. “La arepa más barata está en 250 bolívares, no todos pueden comprar. Un trabajador que devenga un sueldo mínimo no puede comer siempre en la calle. Las ventas están muy bajas”./ar