Tras los últimos apagones y bajones de luz continuos, los habitantes de sectores de Las Tucacas, El Encantado y Calle Rada, parroquia Caraballeda, han denunciado que sus electrodomésticos se han dañado y que ningún ente se hace responsable.
José Álvarez cuenta que se le dañó su aire acondicionado, que con tanto sacrificio lo compró: “Tuve que comprar un ventilador en $30 para no pasar calor porque reparar el aire me sale más caro”.
Otros vecinos señalan, que se les ha quemado sus ventiladores, microondas y hasta televisores: “No es posible que nos estemos quedando sin nuestras cosas, nadie sabe el choque emocional que genera eso”.
Acotaron que desde inicio de septiembre se han acentuado las fallas eléctricas en la parroquia que se extiende por más de 5 horas. Situación que los tiene en agonía porque quedan incomunicados, además, las noches son de insomnio por el calor y los zancudos que se alborotan.