Altuve ha sido clave en repunte de los Astros

Cuando el pasado 25 de julio, durante el partido entre los Rockies de Colorado y los Astros de Houston, el vigente Jugador Más Valioso de la Liga Americana, el venezolano José Altuve, tuvo que salir del juego por molestias en su rodilla derecha, todos los admiradores del talentoso jugador comenzaron a preocuparse.

Al final, era la primera vez en la carrera ligamayorista del oriundo de Maracay que haría una parada en la lista de lesionados, en la que era, hasta ese momento, otra excelente temporada para él.

A casi un mes se extendió la ausencia del criollo de los diamantes. Pero desde su regreso, los actuales campeones de la Serie Mundial han ganado los seis partidos que han disputado.

Altuve volvió el 21 de agosto durante el partido ante los Marineros de Seattle (los Astros registraban 1 victoria y 5 derrotas ante ellos en el mes de agosto) y su equipo salió victorioso 3-2.

Y a pesar de no registrar imparables durante ese encuentro, en los siguientes cinco, el venezolano ha demostrado por qué es llamado también el “Rey del Hit” en la Gran Carpa, y acumuló un total de 9 en 21 turnos oficiales al bate (.429 de promedio).

Pero además de su impacto a la ofensiva, Altuve es una pieza clave en el cuadro interior de los Astros, demostrado en múltiples ocasiones antes y después de su regreso a los campos de juego.

Recordemos que los Astros registraron marca de 7-9 durante los primeros 16 juegos del mes en curso, justo antes del regreso de Altuve. Y desde entonces, han mostrado su mejor cara, incluso destronando del liderato de la División Oeste de la Liga Americana, a unos Atléticos que parecían imparables. 

Por supuesto, el beisbol es un deporte de equipo y José Altuve no puede ganar campeonatos él solo. De hecho, la racha de victorias pudiera verse interrumpida en breve, aún con la excelente actuación de Altuve.

Pero los Astros de Houston saben bien que contar con él para la postemporada del 2018 podría ayudarlos a ser fuertes contendientes en la Liga Americana y por qué no, soñar con el bicampeonato.