El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, condenó la devastación el Arco Minero del Orinoco, en el estado Bolívar, lo que calificó como una “masacre ambiental” sin control.
Almagro lamentó que las autoridades venezolanas no apliquen ningún tipo de control para preservar el ecosistema de la región.
“Venezuela vive también una masacre ambiental que el régimen destruye y ni siquiera pretende controlar. Las próximas generaciones tienen derecho no sólo a que se conserven los recursos naturales del país, sino a vivir en un ambiente sano”, escribió en Twitter el uruguayo.
Un estudio del Observatorio de Conflictos Mineros de América Latina (Ocmal) detalló la gravedad del daño causado en esta zona del estado Bolívar.
«Los trabajos de exploración y explotación mineras del Arco del Orinoco son realizados bajo las técnicas tradicionales de exploración y explotación. Así pues, la deforestación y la quema de millones de hectáreas, el uso masivo de mercurio, cianuro y arsénico, el desvío de los cursos naturales de las corrientes de agua y la remoción de inmensas extensiones de superficie perjudican de manera permanente la tierra como el agua, el clima y la biodiversidad de toda la zona».