En casi 80% aseguran los carniceros que ha disminuido el consumo de carne y pollo, a pesar de que ellos han bajado los precios.
Los consumidores la piensan dos veces antes de comprar un pollo entero que cuesta más o menos el equivalente de una quincena de un trabajador que gana sueldo mínimo.
“Un pollo nada más cuesta más de 6.000 bolívares. La gente lo que compra son vísceras como el bofe y el hígado que están en Bs. 1.500 y Bs. 18.00, respectivamente” dice Gilmer Castro, carnicero de Maiquetía.
Además indicó que de 15 reses que compraban a la semana ahora solo piden cinco, porque la demanda ha bajado de manera sustancial debido a los exorbitantes precios.
Resuelven con mortadela y fiambre
Por su parte, Miguel de Santiago, carnicero de La Atlántida, explica que la gente ha optado por comprar mortadela y fiambre para hacerlo guisado y sustituir el salado.
“Prefieren pagar Bs. 3.000 por un kilo de fiambre a comprar tres bistec o menos. También llevan mucho los empanizados de pollo que están en Bs. 5.200. La chuleta no es la primera opción porque ya superó los Bs. 6.600”.
Respecto a la carne indica que “no la pedimos porque tenemos miedo de posibles multas o de que se pierda porque simplemente no todo el mundo la puede comprar”. /MEM