Al menos cinco personas murieron hoy y otras veintidós resultaron heridas, incluidos miembros de fuerzas de seguridad, en un doble ataque contra una mezquita chií situada al sur de la capital iraquí, informaron a Efe fuentes de seguridad.
Primero, una bomba estalló cerca de una “huseiniya” (templo chií) en la zona de Al Yusefiya, a unos veinte kilómetros al sur de Bagdad.
Tras la llegada de las fuerzas de seguridad y otras personas al lugar de la explosión, un suicida se lanzó en medio de la muchedumbre e hizo estallar el cinturón de explosivo que llevaba adosado al cuerpo, detallaron las fuentes.
Ambas explosiones causaron además destrozos materiales en la mezquita y en varios edificios y vehículos cercanos.
Desde 2003, los chiíes son blanco de atentados perpetrados por suníes radicales, especialmente durante las festividades religiosas de esta rama minoritaria del islam, que en Irak constituye un 60 por ciento de la población.
Los ataques de hoy tienen lugar cuando esta comunidad religiosa se prepara para conmemorar los primeros cuarenta días del aniversario del fallecimiento del imán Al Husein, nieto del profeta Mahoma y el tercero de los doce imanes venerados por los chiíes.
El imán Husein fue asesinado en Irak en el año 680 por partidarios del segundo califa omeya Yazid I, lo que supuso el cisma entre los chiíes, partidarios de que el gobernante de los musulmanes siguiera perteneciendo a la estirpe de Mahoma, y los suníes, que optaron por un califa elegido por la comunidad.