Amnistía Internacional (AI) pidió a los líderes del G20 “una distribución mundial equitativa de las vacunas de Covid-19” con motivo de la cumbre que se celebrará los días 30 y 31 de octubre en Roma.
“Mientras que los índices de vacunación en los países del G20 están en torno al 63%, en los países con ingresos bajos y medianos solo ha podido vacunar al 10% de la población“, indicó la secretaria general de AI, Agnès Callamard, en un comunicado en el que se pide a los dirigentes que no vuelvan a “repetir su fracaso para garantizar la igualdad de acceso a las vacunas”.
La distribución de las vacunas dio “esperanza a un mundo paralizado por covid-19 y salvó millones de vidas”, destacó Callamard, aunque señaló el aumento de muertes a causa de la enfermedad desde entonces: “Desde que se administró la primera vacuna, la tasa de muertes (…) ha aumentado de 1.3 a casi 5 millones de personas en 2021 debido a las graves desigualdades de acceso”.
“El grado de egoísmo y avaricia que reflejan estas muertes es infinito”, reprobó Callamard, quien instó a los países más ricos a “compartir” de manera inmediata sus vacunas “por el interés superior de todo el mundo”.
La secretaria general de AI reconoció la disposición de algunos países a redistribuir vacunas, aunque “muchos aún no han anunciado un calendario concreto para hacerlo y varios no lo harán hasta septiembre del año que viene”.
“Las vacunas deben compartirse ya (…), sobre todo si queremos garantizar la reapertura de las fronteras y la recuperación de la economía global de un modo justo”, apremió, en una petición que AI realiza junto con miembros de la Alianza Vacuna para el Pueblo.