Luisana Brito.- Entre botes de aguas servidas e insalubridad, viven los vecinos de Marapa Marina, en Catia la Mar, quienes explican que desde hace una semana, aproximadamente, las tuberías están colapsadas.
Sin embargo, no es la primera vez que ocurre, pues aseguran que en ocasiones Hidrocapital las ha reparado, pero en menos de tres días vuelven a taparse, situación que los mantiene preocupados ya que temen un posible brote de escabiosis.
La situación genera un foco de contaminación, que afecta directamente a los que viven en las residencias de Marapa Marina y a los estudiantes de la Escuela Técnica Carlos Fiol, quienes a diario conviven con la presencia de malos olores y zancudos
Marisela Rodríguez, explica que también se ven afectados los niños y adultos mayores que practican deportes en el estadio, ya que cuando el agua baja con fuerza, sube hacia la acera y de allí al terreno de juego.
“Estas cloacas deben ser canalizadas porque hay mucha contaminación. Los malos olores proliferan por todo el lugar. Estamos cansados de denunciar la falta de mantenimiento y nadie nos hace caso. Tal vez los entes encargados están esperando un hecho grave para tomar cartas en el asunto”.
Por su parte, Carlos López destaca, que este derrame constante de agua, deteriora la capa asfáltica de la vía. “Por aquí no vienen a asfaltar y de paso el agua hace que el asfalto se levante y los carros son los que sufren las consecuencias”. LB/ mp