Luisana Brito.- Desde hace 10 días aproximadamente, unas 12 familias del sector Segundo Jabillo, en Zamora, Catia La Mar, están siendo afectadas por un bote permanente de aguas servidas. Explican, que la problemática se debe a que las tuberías están muy viejas y tapadas por los sedimentos de tierra, producto de las últimas lluvias.
María González señala, que la semana pasada, Hidrocapital acudió al lugar para destaparlas, y al cabo de dos días volvió a colapsar. “Es una podrición insoportable, y no terminan de solucionarlo por completo. Tenemos que vivir con las ventanas y puertas cerradas, porque los malos olores se meten a las casas y es un criadero de zancudos”.
Asegura, que en una reunión efectuada el día de ayer con la hidrológica, los representantes les dijeron que debían esperar un tiempo prudencial, ya que las averías se solventan, según el orden en que van llegando los reportes.
“Nos dijeron que debíamos tener paciencia, porque habían otros casos antes que este. Pero si ellos tardan 20 días en Maiquetía, son 20 días que tenemos que convivir con este foco de contaminación. No es la primera vez que esto sucede, pero el problema es que tienen que reemplazar esa tubería deteriorada”.
El agua llega cada 15 días
Con respecto al agua potable, Rodríguez comenta que les llega de 15 a 20 días, carencia que les mantiene invirtiendo semanalmente hasta Bs. 450, en la compra de agua mineral para cocinar y prepararles los alimentos a los más pequeños de la casa.
“Las cisternas nos cobran hasta cuatro mil bolívares y cada vez quieren aumentarle un poco más, y por aquí no llegan los operativos de la Gobernación para que por lo menos podamos cargar unos cuanto tobos y ahorrarnos un poquito de dinero. Hidrocapital lo que sabe decirnos, es que la sequía es en todo el estado, pero eso no logra solventar la situación”. LB/ mp