A pesar de los reiterados llamados de atención por parte de los vecinos de Playa Verde sobre el pozo de aguas negras en la vía principal, la problemática continúa y cada día es peor.
“Algunas partes se han ido secando por el sol, pero el hedor es insoportable y desagradable. Es necesario que de una vez por todas drenen el agua y liberen completamente la vía”, comentó un vecino.
Debido a que hay partes en donde el agua es profunda, los vehículos y motos dan la vuelta por Playa Grande o se orillan para evitar espichar sus cauchos. “Tenemos que cruzar a la vía contraria para poder pasar, es imposible mantenerse en su carril”.
El hedor llega a los apartamentos cercanos, quienes mantienen sus ventanas cerradas para evitar enfermedades y el ingreso de moscas a las habitaciones. / VC/jd