En esta última semana de cuaresma, cuando nos preparamos para celebrar la Semana Santa, el obispo Raúl Biord Castillo nos invita a acercarnos al sacramento de la reconciliación y a comprometernos a promover siempre la vida que celebraremos en la Pascua.
Anunció que este sábado 1 de abril será la misa crismal, la cual fue adelantada para que todos los sacerdotes y fieles puedan asistir, “momento de encuentro de la comunidad diocesana para agradecer a Dios el don de la fe y de ser una Iglesia donde el obispo, los sacerdotes, diáconos, religiosas y laicos estamos todos al servicio de la fe”.
Monseñor reflexionó sobre la lectura de la palabra de Dios en el quinto domingo de cuaresma, la cual se centra en la futura resurrección de la muerte. Recordó que el tiempo de cuaresma comenzó el Miércoles de Ceniza con la imposición de “esa ceniza que nos recuerda que somos de polvo y al polvo volveremos. Tarde temprano el Señor nos llamará a su presencia, la vida la tenemos como un préstamo para hacer el bien. Pero no somos eternos, un día moriremos, sabemos que la vida es un regalo de Dios y al final de nuestra vida nos encontremos con Él. Mucha gente vive mundanamente creyendo que la verdadera realidad está en la tierra, pero la verdadera realidad es la vida eterna donde el Señor nos premiará con la resurrección”.
Destacó que en la primera lectura del profeta Ezequiel se nos habla de una promesa de resucitar estos cuerpos mortales, mientras que en la carta de San Pablo a los romanos nos hace ver que nuestros cuerpos mortales recibirán la vida por el espíritu de aquel que resucitó de la muerte. En el Evangelio nos relata el episodio de la resurrección de Lázaro./LDS