“Queremos justicia y que se sepa lo qué pasó con mi nieta”, expresó Nurys Valdés, abuela de Camila Leon, una niña venezolana de 13 años, que fue brutalmente golpeada por una compañera de clases en Beck Junior High School.
La golpiza ocurrió el 1º de enero de este año en la escuela, en la ciudad de Katy, en Texas. Su tío Andrés Socorro asegura que “la escuela no ha hecho ningún pronunciamiento y no quieren que esto se difunda para no dañar su reputación en este condado.
“Hemos intentado levantar cargos con la policía de la escuela y la policía de Katy pero ellos no quieren escucharnos ni ayudarnos. Necesitamos hacer un llamado a todos a denunciar este acto porque hoy es mi sobrina mañana puede ser un familiar de ustedes”.